feedburner

Recibe las actualizaciones de DIARIO DE PERIODISMO

Con la mochila a cuestas

Etiquetas:

Tras la fiesta democrática –como diría nuestro queridísimo delegado Ángel Negro- que supuso la última entrega de “Con la mochila a cuestas”, de la que salió como ganadora/triunfadora la bella ciudad de Barcelona, que los barceloneses tienen la posibilidad de saborear a diario, esta semana, queridos mochileros, os voy a trasladar a un sitio de los que vuelves con una huella marcada. Y es que en España tenemos el privilegio de tener a orillas del Mediterráneo a la ciudad de

ELCHE

Elx, la llaman los del Pais Valencià. Sin duda, todos conoceréis a la ilicitana más universal, aunque sólo le hayamos visto la cabeza a la Dama. Sacerdotisa, mujer de una persona de importancia… nadie sabe quién es, sólo que cierto día de 1897 se descubrió una de las joyas del arte español.

En la ciudad levantina nos encontramos con una curiosísima paradoja, ya que Elche no ha sido declarada patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, pero sí tiene patrimonio de la Humanidad, en dos de sus señas de identidad, junto a la Dama: El Misterio, un auto sacramental que ha llegado a nosotros desde tiempos medievales, y que se representa los días 14 y 15 de agosto, y el Palmeral, un vasto jardín repleto de palmeras, algunas de épocas muy antiguas, que se calcula que posee unos 200000 ejemplares. Y no, no me he excedido con los ceros. Son doscientas mil palmeras.

Nuestra visita bien puede empezar aquí, perdidos entre palmeras. No se ideó como un jardín para el paseo, ni mucho menos, ya que los ilicitanos sacaban provecho de las palmeras mediante la venta de dátiles. Una vez esto dejó de ser rentable, se convirtió en lo que es hoy. Otro vergel de la ciudad mediterránea es la “Huerta del Cura”, un espacio que bien podemos calificar de jardín botánico, con una enorme variedad de plantas autóctonas, y coronado por la imponente Palmera Imperial, que posee 7 brazos que parten de la misma base.

Elche nos ofrece un recorrido histórico sin igual. Incluso se puede optar por hacerlo en orden cronológico; comenzando por el Museo Paleontológico, con gran variedad de fósiles y restos de la antigüedad, podemos desplazarnos más tarde al yacimiento de La Alcudia, donde se halló en 1897 la Dama, y que estuvo habitado desde el Neolítico hasta finales de la época visigoda.

La siguiente parada en la ciudad alicantina para seguir este orden que os propongo debería ser la exposición abierta en torno a los baños árabes, profusamente decorados con azulejos y arcos de gran belleza, y que se construyeron aprovechando parte de las antiguas termas romanas.

El Misteri es importante para la ciudad de Elche, y es por ello que una de sus joyas artísticas sea el escenario donde se lleva a cabo la representación, la Basílica de Santa María, del siglo XVIII, y con no poca historia, ya que allí se represento, como bien digo, el Misteri por primera vez, pero la Basílica se derrumbó en dos ocasiones, una en el siglo XV, la que se había construido sobre la antigua mezquita, y otra en el XVII.

Para acabar con el recorrido histórico, Elche nos ofrece un gran museo de arte Contemporáneo, que se complementa con la exposición escultórica al aire libre Espai d’Art d’Elx, y que conforman una muy importante colección de arte de vanguardia.

Una de las paradas que no he incluido en el recorrido anterior, más que nada porque es atemporal, es el MAHE, el museo de historia de la ciudad, que podéis visitar al final, al principio, o en medio de vuestra estancia en Elche. Merece la pena que invitáis aquí unas horas de vuestro tiempo.

Finalmente, llega el momento de descansar (o no) de las patadas que habréis dado para visitar Elche, en alguno de sus bares, de los que no destacaré ninguno en espacial, puesto que si algo tiene Levante es variedad en cuanto a la fiesta. Lo que sí me vais a permitir recomendaros, es que no dejéis de visitar las playas de Elche, donde podréis dar envidia a vuestro guía mientras se queda escribiendo artículos y buscándoos destinos. Eso sí, lo hago con cariño, queridos mochileros, y vosotros lo sabéis.

En fin, pasado el momento envidia por no tener playa en Valladolid, os dejo con uno de los momentos más impresionantes, cargado de pólvora, como no puede ser de otra manera, de las fiestas de Elche, en honor a la Virgen de la Asunción –hay otro pueblo que tiene la misma patrona, pero no recuerdo cuál…-: la Nit de l’Albà. De esta, vais a ver cómo aprendo valenciano. Y a tirar cohetes también.



¡Hasta la semana que viene, mochileros!

4 comentarios:
gravatar
KARNY dijo...
jueves, marzo 22, 2007 11:43:00 p. m.  

Mientras veo el excelente video te voy dejando comentario...y es que los fuegos artificiales me encantan.
Mira q he ido muchas veces al levante...pero Elche no lo conozco. La Dama de Elche sí, puesto que está en Madrid y he tenido el placer de observar tan misteriosa escultura.
En esta fiesta de la democracia...jajja
dentro de poco, ya vereis, cuando se derritan los polos, la playa de Valladolid va a ser la más visitada del mundo, si no tiempo al tiempo.
Hasta la próxima semana pocholo!!y la mochilaaaaaaaaaaa!!!
jaj
salud!!! (siempre serás el líder de opinión de la clase jeje)

gravatar
Antonio dijo...
viernes, marzo 23, 2007 12:58:00 a. m.  

Vaya vaya... Grata sorpresa ver que recomiendan una visita a Elche en este blog. Yo también la recomiendo, merece la pena el paseo. No sé si el autor de la reseña ha estado alguna vez en Elche, pero si no es así, estás más que bien documentado. A todo lo que dices, añadiría el Parc Municipal (espléndido) y las riberas del río Vinalopó, acondicionadas también para el paseo. El río va casi seco, pero circula encajonado a su paso por la ciudad; digno de mención es, entre otros el puente de Altamira. En espacios urbanos, vale la pena la Plaça de Baix, donde está el Ayuntamiento, y sus alrededores (la Basílica de Santa María coge cerca). Y para playas, recomiendo especialmente la de l'Altet, situada al lado del pueblo de igual nombre (donde está el aeropuerto, y que en realidad es una pedanía de Elche), dado que se trata de un espacio sin urbanizar, tranquilo como pocos.

Sólo un pequeño tironcillo de orejas: no es "la Huerta del Cura", sino "el Huerto del Cura" (que puede que a algún ilicitano le dé sarpullido al ver su parque con el sexo cambiado, jejeje). Y otra cuestión, ya más personal, y reconozco que algo pejiguera: por aquí, la denominación "Levante" no gusta en absoluto a la mayoría. De hecho, entidades como la Unió de Periodistes Valencians ha llegado a enviar cartas a los medios de ámbito nacional para pedir que no utilicen esa denominación. No obstante, comprendo que desde el centro de la Península haya tendencia a su uso, como forma genérica para referirse a la Comunidad Valenciana, aunque ya digo que a los de la zona no nos gusta precisamente.

Cuestiones puntillosas aparte, felicidades por esta estupenda forma de promocionar el sur del País Valencià y, más concretamente, una ciudad que suele pasar lamentablemente desapercibida pero que bien vale la pena conocer.

Saludos desde un punto bastante cercano a Elche.

gravatar
Antonio dijo...
viernes, marzo 23, 2007 1:02:00 a. m.  

Ah, per cert... i veig que vas prou bé de valencià ;-) Salutacions!

gravatar
Sarita dijo...
domingo, marzo 25, 2007 2:21:00 p. m.  

Uy me ha sorprendido un montón tu elección esta semana! Yo nunca he estado en Valencia (siempre estoy igual, a ver si me hago una rutilla por España, que doy pena...) y la verdad es que entre tú y el chico que ha escrito aquí encima me habéis despertado el gusanillo. Además es interesante lo que nos ha dicho Antonio: que no digamos Levante. Nunca te acordarás sin saber algo más!

Un beso Carlos!

Publicar un comentario

Tr3s Son Multitud. La serie por capítulos