Reflexiones a Pilot Rojo
Publicado por
KARNY
Etiquetas:
Reflexiones a Pilot Rojo
UNA CARTA MUY FÁCIL DE ESCRIBIR
Arrugados y deslucidos fascistas:
He decidido escribiros esta epístola para así dirigirme a vosotros y exclamaros directamente ¡Ya era hora! Ya era hora de que el sentido común soltase algún lapo sobre la ley, de que aunque se os imponga, el respeto machaque a la burla en el monumento que construyeron miles de esclavos. Yo, por eso mismo, he de confesaros que nunca os tuve respeto. Por el motivo por el que vosotros nunca tuvisteis respeto a nadie. Ni a vosotros mismos. Si no, ¿Me podéis explicar por qué tenéis varias organizaciones con una masa humana tan pequeña? Me contesto yo solo. Las ansias de poder, ese hambre que siempre tuvisteis de mandar en todos los rincones del planeta, la violencia con la que siempre tratasteis cualquier problema, ya fuese externo o interno, os corrompió de tal manera que entre vosotros no os podéis ni ver. Risa me dio cuando visitasteis Valladolid con motivo de un concierto neonazi, cuya asistencia se esperaba en torno a unas mil personas, vinisteis 200 y os matasteis entre vosotros. Sin embargo a mi nunca me daréis pena, ni si quiera en el fondo.
Ya veis, al igual que un camarada vuestro, me ha dado por escribir cartas. Pero tranquilos, que no va infectada de Ántrax como aquel embustero propagó junto a otros. Ganas no me faltan, pero no me gustaría que me identificasen como a uno de vosotros. De todos modos, contentos estaréis, campando a vuestras anchas por la escena política teniendo a uno de vuestros peores enemigos en la clandestinidad y en la cárcel; manifestándoos sin apenas represión y matando sin piedad. Pero a vosotros no os llegan las amenazas jurídicas por no condenar la violencia, no os vetan en ningún ayuntamiento aun apoyando los asesinatos y agresiones de que lleváis haciendo apología durante toda vuestra historia. Lucrecia, Aitor, ahora Carlos... para vosotros no son asesinatos, ni muertos, sino acciones de valor, por la causa española, por Dios y el Caudillo que en gloria esté, de guerreros arios que siguen el dictamen del Fürher. Y es que sois como él. Interpretáis el papel de matones de barrio y no sois más que unos acomplejados, nunca tuvisteis voz en el colegio hasta que os pusieron una esvástica en la camiseta y os creísteis eso de “nacionalistas molones” y que lucháis por el bien de vuestra Madre Patria.
Pero sí hombre, yo al fin y al cabo, estoy un poco más contento. Ayer os concentrasteis para imitar la última ingesta de Jesucristo, esta vez la reunión era una Última Misa cargada de odio y rencor. Fachas conservadores, rancios ultracatólicos, falangistas con indumentaria oficial, neonazis reprimidos y represores, todos al unísono expresando vuestra mala ostia por lo que debería haber pasado hace más de 30 años. Coreando la unidad que presumís pero que en verdad os queda muy lejos. Solo es un pequeño paso, un mínimo gesto, pero enorme para mí y para vosotros, ya que nunca se hizo nada que os perjudicara y nunca se ajustició nada que nos reconfortara a los demás.
Sin más, deseo que os vaya mal. Ojalá se os ilegalice, ojalá dejéis de infectar la vía pública con vuestro odio misántropo, ojalá seáis reprimidos aunque sea una centésima parte de cómo vosotros reprimisteis la libertad.
Sin Saludos
Reflexiones a Pilot Rojo
Arrugados y deslucidos fascistas:
He decidido escribiros esta epístola para así dirigirme a vosotros y exclamaros directamente ¡Ya era hora! Ya era hora de que el sentido común soltase algún lapo sobre la ley, de que aunque se os imponga, el respeto machaque a la burla en el monumento que construyeron miles de esclavos. Yo, por eso mismo, he de confesaros que nunca os tuve respeto. Por el motivo por el que vosotros nunca tuvisteis respeto a nadie. Ni a vosotros mismos. Si no, ¿Me podéis explicar por qué tenéis varias organizaciones con una masa humana tan pequeña? Me contesto yo solo. Las ansias de poder, ese hambre que siempre tuvisteis de mandar en todos los rincones del planeta, la violencia con la que siempre tratasteis cualquier problema, ya fuese externo o interno, os corrompió de tal manera que entre vosotros no os podéis ni ver. Risa me dio cuando visitasteis Valladolid con motivo de un concierto neonazi, cuya asistencia se esperaba en torno a unas mil personas, vinisteis 200 y os matasteis entre vosotros. Sin embargo a mi nunca me daréis pena, ni si quiera en el fondo.
Ya veis, al igual que un camarada vuestro, me ha dado por escribir cartas. Pero tranquilos, que no va infectada de Ántrax como aquel embustero propagó junto a otros. Ganas no me faltan, pero no me gustaría que me identificasen como a uno de vosotros. De todos modos, contentos estaréis, campando a vuestras anchas por la escena política teniendo a uno de vuestros peores enemigos en la clandestinidad y en la cárcel; manifestándoos sin apenas represión y matando sin piedad. Pero a vosotros no os llegan las amenazas jurídicas por no condenar la violencia, no os vetan en ningún ayuntamiento aun apoyando los asesinatos y agresiones de que lleváis haciendo apología durante toda vuestra historia. Lucrecia, Aitor, ahora Carlos... para vosotros no son asesinatos, ni muertos, sino acciones de valor, por la causa española, por Dios y el Caudillo que en gloria esté, de guerreros arios que siguen el dictamen del Fürher. Y es que sois como él. Interpretáis el papel de matones de barrio y no sois más que unos acomplejados, nunca tuvisteis voz en el colegio hasta que os pusieron una esvástica en la camiseta y os creísteis eso de “nacionalistas molones” y que lucháis por el bien de vuestra Madre Patria.
Pero sí hombre, yo al fin y al cabo, estoy un poco más contento. Ayer os concentrasteis para imitar la última ingesta de Jesucristo, esta vez la reunión era una Última Misa cargada de odio y rencor. Fachas conservadores, rancios ultracatólicos, falangistas con indumentaria oficial, neonazis reprimidos y represores, todos al unísono expresando vuestra mala ostia por lo que debería haber pasado hace más de 30 años. Coreando la unidad que presumís pero que en verdad os queda muy lejos. Solo es un pequeño paso, un mínimo gesto, pero enorme para mí y para vosotros, ya que nunca se hizo nada que os perjudicara y nunca se ajustició nada que nos reconfortara a los demás.
Sin más, deseo que os vaya mal. Ojalá se os ilegalice, ojalá dejéis de infectar la vía pública con vuestro odio misántropo, ojalá seáis reprimidos aunque sea una centésima parte de cómo vosotros reprimisteis la libertad.
Sin Saludos
Reflexiones a Pilot Rojo
Post Data: España, Nuestra, A su Medida y Libre, pero libre de vosotros.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
miércoles, noviembre 21, 2007 12:51:00 a. m.
Hace pocos minutos ha acabado el día en el que se memora la muerte del tipejo aquel que tuvo a un país entero viviendo 40 años de " extraordinaria placidez".Parece increible que 30 años después sigamos viendo las patéticas imágenes de gente con el brazo levantado delante de una tumba que recuerda lo peorcito que ha pasado por España. Increible que sigan portando en sus brazos banderas del pollo de los huevos (el pollo pelao ya, como en la viñeta de Publico) y gritando como energúmenos cuando llega al acto la hija del "hijoputísmo" mientras la obsequian con un cara al sol.
Pero por fin se acabó lo que se daba. El sentido común se ha ultilizado y ya no se revolverá más la mierda (¿no son ellos los primeros que no quieren sacar cosas a relucir?)
Mientras tanto la Iglesia pide perdón con la boquita pequeña y los simbolos franquistas en ciudades como Santander o Melilla (que conservan al viejo en el caballo y mirando al mar respectivamente)permanecen porque son "parte de la historia"
Iros a leventar el brazo a otra parte porque en determinado valle ya no está permitido.
Muy buen post, Miguel. COMO SIEMPRE, qué coño!! jeje! Besazos!p p p p p
Publicar un comentario