Apuntes de Geografía
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Antonio
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Apuntes de geografía
CUÁN VASTOS SON MIS DOMINIOS
Buenas,
Decía yo la semana pasada que iba a explicar algo más sobre Pedro Almodóvar y su apellido. Porque a pesar de que en Cuenca hay un pueblo llamado Almodóvar del Pinar, lo más probable es que su apellido no provenga de esa localidad, sino de Almodóvar del Campo, una importante población de la provincia de Ciudad Real no muy lejana al municipio donde nació el insigne director de cine, Calzada de Calatrava. Y de Almodóvar del Campo quería yo hablar hoy para empezar. Porque resulta que este municipio, a pesar de tener la nada despreciable cifra de 6.936 habitantes (muchos ha perdido en los últimos años), tiene una densidad bajísima, debido a que su término municipal es el quinto más extenso de España, nada menos que con 1.208,27 kilómetros cuadrados. Algo así como el 60% de toda la superficie de Guipúzcoa.
Almodóvar del Campo forma parte del selecto grupo de 8 municipios con más de 1.000 kilómetros cuadrados de extensión. Otros 51 superan los 500. La inmensa mayoría se encuentran en la mitad sur del país, con excepciones muy contadas. La explicación es bien fácil, por el distinto tipo de poblamiento existente en esa zona de España, más habitualmente concentrado en grandes localidades separadas a cierta distancia unas de otras, y con frecuencia rodeadas de grandes fincas. Otro factor que puede determinar una superficie extensa es la herencia de antiguos privilegios concedidos a algunas ciudades, bajo los cuales se les otorgó una amplia jurisdiccción. También, en algún caso, la progresiva anexión de otros municipios.
El ejemplo segundo es el que predomina en Murcia, donde tan sólo 45 municipios se reparten un espacio de 11.313 kilómetros cuadrados, y de una forma poco equilibrada además. Es decir, algunos términos municipales de muy poca superficie cohabitan con los extensísimos territorios de Lorca (1.675,21 kilómetros cuadrados), Jumilla (969), Moratalla (954,82), la propia Murcia (886) o Caravaca de la Cruz (858,76). Estos términos tan grandes hacen que en ocasiones haya pedanías a más de 40 kilómetros de su capital municipal. En el caso concreto de Lorca, un cartel instalado en algunos de sus límites decía que el municipio medía 96 kilómetros de norte a sur, desde la más alta montaña hasta la costa. Así, no es de extrañar que, pese a tener una población de 89.936 personas, su densidad sólo sea de 53,69 habitantes por kilómetro cuadrado.
El de Lorca fue el término municipal más grande de España hasta que, poco antes de 1960, se le segregó la localidad de Puerto Lumbreras. Desde entonces, el término de mayor extensión de todo el país es del de la ciudad de Cáceres, con 1.750,33 kilómetros cuadrados, casi una cuarta parte de lo que ocupa toda la provincia de Valladolid. Y a pesar de su extensión, apenas tiene más núcleos urbanos que la propia ciudad. Eso sí, como decía antes, a gran distancia: la aldea de Rincón de Ballesteros se encuentra a 39 kilómetros de su ayuntamiento. Además, en la comunidad de Extremadura existen otros nueve municipios cuya superficie sobrepasa los 500 kilómetros cuadrados, algo que no debe extrañar, puesto que por algo está conformada por las dos mayores provincias de España. Así, la ciudad de Badajoz es la tercera en el ránking nacional, con 1.470,43 kilómetros cuadrados. Los siguientes ayuntamientos extremeños (pacenses, en concreto) en extensón son Mérida, con 865,61, Jerez de los Caballeros, con 740,55, y Alburquerque, con 740,55.
Es habitual que los términos tan extensos pertenezcan a ciudades importantes en lo que a población se refiere. Así, tras Cáceres, Lorca y Badajoz, está Córdoba, con 1.255,24 kilómetros cuadrados, y también superan los 1.000 Jerez de la Frontera, Albacete y Zaragoza. Sin embargo, no tiene por qué ser así, y también se da el caso de pueblos modestos con unos territorios inmensos. Ya citaba el caso de Almodóvar del Campo, que no llega a 7.000 habitantes, pero aún los hay más significativos: Hornachuelos (Córdoba) tiene 909,22 kilómetros cuadrados y 4.622 vecinos; Santiago-Pontones (Jaén), resultado de la fusión de dos municipios en 1972, ocupa 682,84 kilómetros cuadrados y en ellos sólo viven 4.040 personas; Chinchilla de Monte-Aragón (Albacete), 680,03 km2 y 3.507 habitantes; Los Yébenes (Toledo), 677,46 km2 para 6.341 personas; y Retuerta del Bullaque (Ciudad Real), 653,90 km2 para tan sólo 1.127 habitantes, ni siquiera tocan a 2 por cada kilómetro cuadrado. Otras tres localidades españolas (Alía, Cáceres; Alhambra, Ciudad Real; y Cardeña, Córdoba) rebasan también los 500 kilómetros cuadrados y no llegan tampoco a los 2.000 empadronados.
Queda claro que este tipo de municipios predomina en una determinada zona de España, pero también se dan casos aislados en otros lugares. El ejemplo más significativo es Cangas del Narcea, en Asturias, con 823,67 kilómetros cuadrados. En Asturias, al igual que en Galicia y Cantabria, es habitual que los municipios tengan una cierta extensión, dado que hay pocos ayuntamientos y cada uno de ellos cuenta con un sinfín de entidades de población. Y Cangas del Narcea es el único de superficie extrema, pero también otros muchos pueden ser considerados muy extensos: en la provincia de Lugo, por ejemplo, ninguno llega a 500 kilómetros cuadrados, pero hay nueve (incluida la capital) que sí rebasan los 250. En otras zonas del norte español, ya veíamos que también la ciudad de Zaragoza está entre las más extensas, y en esta misma provincia también Ejea de los Caballeros y Caspe están entre los 59 de mayor superficie del país. Otros municipios aragoneses, navarros y catalanes (leridanos, para ser exactos) también están entre los 250 y los 500 kilómetros cuadrados. Por otro lado, otro caso bastante aislado es el de Requena (Valencia), con 814,21 km2.
Finalmente, y para no hacer esto tan extenso como el término municipal de Cáceres, hablaré de los municipios que han aumentado su superficie gracias a la anexión de otras localidades. El ejemplo paradigmático es el de Madrid, que desde 1954 tiene un área de 605,77 kilómetros cuadrados, cuando cinco años antes apenas tenía 66. También Sabiñánigo (Huesca), tras agregarse los terrenos de ocho antiguos municipios entre 1950 y 1975, elevó los suyos propios hasta los 586,82 km2. En esta misma provincia, donde se suprimieron en torno a 150 ayuntamientos en el citado periodo, otros municipios engordaron también mucho, aunque sin llegar a esos niveles, como Jaca, Aínsa, Loporzano, Montanuy o Caldearenas, entre otros. Algo similar ha pasado en determinados puntos de Castilla y León: el término municipal de Arcos de Jalón (Soria) tiene más de 440 kilómetros cuadrados, pero eso sí, después de anexionarse a más de una decena de pueblos próximos entre 1960 y 1970. Caso idéntico el de Villadiego (Burgos), que ocupa casi 328 kilómetros cuadrados.
Bueno, pues hasta aquí el tema. Como siempre, espero que haya sido de vuestro interés, aunque hoy la cosa no iba de nombres extravagantes, sino de otro tipo de curiosidades. Por cierto, el municipio granadino de Puebla de Don Fadrique, que ya he citado en otras ocasiones (y que en parte da apellido al alter ego de Natalia Ortega), es también uno de los 59 más extensos de España: 523,38 kilómetros cuadrados, habitados sólo por 2.565 personas.
En fin, nada más por hoy. Como siempre, la próxima semana más, si puede ser. Saludos a todos.
Buenas,
Decía yo la semana pasada que iba a explicar algo más sobre Pedro Almodóvar y su apellido. Porque a pesar de que en Cuenca hay un pueblo llamado Almodóvar del Pinar, lo más probable es que su apellido no provenga de esa localidad, sino de Almodóvar del Campo, una importante población de la provincia de Ciudad Real no muy lejana al municipio donde nació el insigne director de cine, Calzada de Calatrava. Y de Almodóvar del Campo quería yo hablar hoy para empezar. Porque resulta que este municipio, a pesar de tener la nada despreciable cifra de 6.936 habitantes (muchos ha perdido en los últimos años), tiene una densidad bajísima, debido a que su término municipal es el quinto más extenso de España, nada menos que con 1.208,27 kilómetros cuadrados. Algo así como el 60% de toda la superficie de Guipúzcoa.
Almodóvar del Campo forma parte del selecto grupo de 8 municipios con más de 1.000 kilómetros cuadrados de extensión. Otros 51 superan los 500. La inmensa mayoría se encuentran en la mitad sur del país, con excepciones muy contadas. La explicación es bien fácil, por el distinto tipo de poblamiento existente en esa zona de España, más habitualmente concentrado en grandes localidades separadas a cierta distancia unas de otras, y con frecuencia rodeadas de grandes fincas. Otro factor que puede determinar una superficie extensa es la herencia de antiguos privilegios concedidos a algunas ciudades, bajo los cuales se les otorgó una amplia jurisdiccción. También, en algún caso, la progresiva anexión de otros municipios.
El ejemplo segundo es el que predomina en Murcia, donde tan sólo 45 municipios se reparten un espacio de 11.313 kilómetros cuadrados, y de una forma poco equilibrada además. Es decir, algunos términos municipales de muy poca superficie cohabitan con los extensísimos territorios de Lorca (1.675,21 kilómetros cuadrados), Jumilla (969), Moratalla (954,82), la propia Murcia (886) o Caravaca de la Cruz (858,76). Estos términos tan grandes hacen que en ocasiones haya pedanías a más de 40 kilómetros de su capital municipal. En el caso concreto de Lorca, un cartel instalado en algunos de sus límites decía que el municipio medía 96 kilómetros de norte a sur, desde la más alta montaña hasta la costa. Así, no es de extrañar que, pese a tener una población de 89.936 personas, su densidad sólo sea de 53,69 habitantes por kilómetro cuadrado.
El de Lorca fue el término municipal más grande de España hasta que, poco antes de 1960, se le segregó la localidad de Puerto Lumbreras. Desde entonces, el término de mayor extensión de todo el país es del de la ciudad de Cáceres, con 1.750,33 kilómetros cuadrados, casi una cuarta parte de lo que ocupa toda la provincia de Valladolid. Y a pesar de su extensión, apenas tiene más núcleos urbanos que la propia ciudad. Eso sí, como decía antes, a gran distancia: la aldea de Rincón de Ballesteros se encuentra a 39 kilómetros de su ayuntamiento. Además, en la comunidad de Extremadura existen otros nueve municipios cuya superficie sobrepasa los 500 kilómetros cuadrados, algo que no debe extrañar, puesto que por algo está conformada por las dos mayores provincias de España. Así, la ciudad de Badajoz es la tercera en el ránking nacional, con 1.470,43 kilómetros cuadrados. Los siguientes ayuntamientos extremeños (pacenses, en concreto) en extensón son Mérida, con 865,61, Jerez de los Caballeros, con 740,55, y Alburquerque, con 740,55.
Es habitual que los términos tan extensos pertenezcan a ciudades importantes en lo que a población se refiere. Así, tras Cáceres, Lorca y Badajoz, está Córdoba, con 1.255,24 kilómetros cuadrados, y también superan los 1.000 Jerez de la Frontera, Albacete y Zaragoza. Sin embargo, no tiene por qué ser así, y también se da el caso de pueblos modestos con unos territorios inmensos. Ya citaba el caso de Almodóvar del Campo, que no llega a 7.000 habitantes, pero aún los hay más significativos: Hornachuelos (Córdoba) tiene 909,22 kilómetros cuadrados y 4.622 vecinos; Santiago-Pontones (Jaén), resultado de la fusión de dos municipios en 1972, ocupa 682,84 kilómetros cuadrados y en ellos sólo viven 4.040 personas; Chinchilla de Monte-Aragón (Albacete), 680,03 km2 y 3.507 habitantes; Los Yébenes (Toledo), 677,46 km2 para 6.341 personas; y Retuerta del Bullaque (Ciudad Real), 653,90 km2 para tan sólo 1.127 habitantes, ni siquiera tocan a 2 por cada kilómetro cuadrado. Otras tres localidades españolas (Alía, Cáceres; Alhambra, Ciudad Real; y Cardeña, Córdoba) rebasan también los 500 kilómetros cuadrados y no llegan tampoco a los 2.000 empadronados.
Queda claro que este tipo de municipios predomina en una determinada zona de España, pero también se dan casos aislados en otros lugares. El ejemplo más significativo es Cangas del Narcea, en Asturias, con 823,67 kilómetros cuadrados. En Asturias, al igual que en Galicia y Cantabria, es habitual que los municipios tengan una cierta extensión, dado que hay pocos ayuntamientos y cada uno de ellos cuenta con un sinfín de entidades de población. Y Cangas del Narcea es el único de superficie extrema, pero también otros muchos pueden ser considerados muy extensos: en la provincia de Lugo, por ejemplo, ninguno llega a 500 kilómetros cuadrados, pero hay nueve (incluida la capital) que sí rebasan los 250. En otras zonas del norte español, ya veíamos que también la ciudad de Zaragoza está entre las más extensas, y en esta misma provincia también Ejea de los Caballeros y Caspe están entre los 59 de mayor superficie del país. Otros municipios aragoneses, navarros y catalanes (leridanos, para ser exactos) también están entre los 250 y los 500 kilómetros cuadrados. Por otro lado, otro caso bastante aislado es el de Requena (Valencia), con 814,21 km2.
Finalmente, y para no hacer esto tan extenso como el término municipal de Cáceres, hablaré de los municipios que han aumentado su superficie gracias a la anexión de otras localidades. El ejemplo paradigmático es el de Madrid, que desde 1954 tiene un área de 605,77 kilómetros cuadrados, cuando cinco años antes apenas tenía 66. También Sabiñánigo (Huesca), tras agregarse los terrenos de ocho antiguos municipios entre 1950 y 1975, elevó los suyos propios hasta los 586,82 km2. En esta misma provincia, donde se suprimieron en torno a 150 ayuntamientos en el citado periodo, otros municipios engordaron también mucho, aunque sin llegar a esos niveles, como Jaca, Aínsa, Loporzano, Montanuy o Caldearenas, entre otros. Algo similar ha pasado en determinados puntos de Castilla y León: el término municipal de Arcos de Jalón (Soria) tiene más de 440 kilómetros cuadrados, pero eso sí, después de anexionarse a más de una decena de pueblos próximos entre 1960 y 1970. Caso idéntico el de Villadiego (Burgos), que ocupa casi 328 kilómetros cuadrados.
Bueno, pues hasta aquí el tema. Como siempre, espero que haya sido de vuestro interés, aunque hoy la cosa no iba de nombres extravagantes, sino de otro tipo de curiosidades. Por cierto, el municipio granadino de Puebla de Don Fadrique, que ya he citado en otras ocasiones (y que en parte da apellido al alter ego de Natalia Ortega), es también uno de los 59 más extensos de España: 523,38 kilómetros cuadrados, habitados sólo por 2.565 personas.
En fin, nada más por hoy. Como siempre, la próxima semana más, si puede ser. Saludos a todos.
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domingo, noviembre 11, 2007 2:12:00 p. m.
Sí que son vastos -esperemos que no sean bastos- tus dominios, Antonio. Lo de Lorca es más bien una exageración. Mira que me quedaba yo asombrado cuando me decían que el pueblo de mi padre -menos de 100 habitantes en el oeste de Salamanca, te permito que lo adivines- tenía casi 50 km cuadrados. A ver a cuánto se vende el metro en estos casos. Si es barato, que me pongan unos cuantos.
Buen trabajo. Un saludo, y a ver si adivinas el pueblo.
martes, noviembre 13, 2007 11:13:00 p. m.
Al hablar de "vastos dominios" estaba empleando una frase hecha, no fanfarroneando de conocimientos geográficos, jejeje... Y para bastos, mejor las partidas de cartas... ;-)
Sobre el pueblo salmantino de donde procede tu familia, hombre, me lo pones difícil, porque dotes adivinatorias no tengo... Opciones hay varias: podría ser Espadaña, de donde procede parte de la familia de una buena amiga salmantina, pero podría ser también Gejuelo del Barro, o tal vez Villarmuerto, o Pozos de Hinojo, quizá Peralejos de Arriba, quién sabe si Tremedal de Tormes... ¿Alguno de estos seis? Es probable que no, pero es que en el oeste de Salamanca hay una treintena de ayuntamientos con menos de 100 habitantes (en toda la provincia son 44), así que comprende que yerre el tiro.
Saludos y gracias por tus comentarios, son un síntoma de que al menos hay alguien a quien le gusta el tema.
jueves, noviembre 22, 2007 10:59:00 a. m.
Desde Almodóvar del Campo te escribo, pero desde su extremo norte, es decir, el municipio propiamente dicho. Aquí se tiene mucho orgullo del término municipal, tan enorme como dices y tan despoblado a la vez. Pero también debemos decir que la población, la actividad económica y las comunicaciones e infraestructuras están muy desequilibradas. Porque si bien es cierto que la cabecera no es excesivamente grande, la verdad es que al encontrarse tan cerca de Puertollano (y tan descentrado del resto del municipio) con toda su actividad económica e industrial, así como de infraestructuras viales y ferroviarias, hace que a nivel social esté mas ligada su actividad a ese entorno que al resto de su término, dominado además en muchas zonas por enormes fincas privadas que acaparan territorio y comunicaciones.
Es solo un apunte. Saludos
lunes, noviembre 26, 2007 12:41:00 a. m.
Vaya, este comentario sí que me sorprende, no esperaba que nadie fuera a leer esto precisamente en Almodóvar del Campo. Muchas gracias por el apunte, 'Anónim@'. Sé de la proximidad de Almodóvar a Puertollano (y que, entre otras cosas, hace unas décadas Puertollano pertenecía al partido judicial de Almodóvar, y no como ahora), y de lo 'descentrado' que queda el pueblo respecto a sus tierras. Aún así, me llama la atención que el municipio haya perdido 800 habitantes en 15 años, cuando por esa cercanía a Puertollano, lo normal sería que mantuviera su población o incluso creciera. En cuanto a lo que dices de las grandes fincas, no me sorprende, imagino que será zona de latifundios, dado el enorme término y que, aparte de haber pocas aldeas en él, están muy distantes entre sí... y del propio Almodóvar... Mal lo tendrá alguien de San Benito cuando quiera ir a arreglar algún papeleo al Ayuntamiento, con el trecho que hay.
Vuelvo a agradecerte tu comentario. Espero que haya más visitas desde Almodóvar del Campo. ¡Saludos!
jueves, diciembre 06, 2007 7:03:00 p. m.
Vale, lo acabo de pillar. No, el vasto dominio no es el de La Alberca, ¡qué va! No sé por cuánto andará su extensión, pero desde luego no se acerca a los 50 o cifras así ni de lejos. El que me refiero es el pueblo de mi padre (ahora te toca adivinarlo a tí), en la comarca del Abadengo, no demasiado lejos de Vitigudino. La extensión tan a lo bestia es a causa de las grandes fincas destinadas a la ganadería que hay. Un saludo, compañero.
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