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PASIÓN DE PERIODISTAS
Segunda Temporada

En el capítulo anterior los chicos una vez dentro del castillo encontraron de nuevo a Mac que les acusó de la pérdida de un retrato. ¿Quién les habría inculpado?, ¿dónde encontrarían algunas respuestas?.

Cuando estaban ya saliendo del castillo, Nico quedó un poco rezagado mirando el único cuadro que había en todo el pasillo que estaba mal colocado. La curiosidad le llevó a acercarse hasta allí , y al intentar poner el cuadro en su sitio se produjo un ruido extraño mientras parte de la pared se estaba abriendo a modo de puerta. Nico asustado llamó a sus compañeros, muchos de los cuales ya estaban fuera del castillo. Todos otra vez dentro y encabezados por Merayo siguieron el estrecho pasillo que estaba iluminado con pequeñas antorchas en todo su recorrido. No se oía ni una voz tan sólo las palabras susurradas de “ estad atentos a todo” de Tamara. Tras haber recorrido un largo pasillo llegaron a un espacio más amplio en cuyo fondo había una enorme puerta que llevaba inscritas las palabras : “La Majestad”. Los chicos la aporrearon varias veces pero ninguna voz respondía del otro lado así que Miguel dijo totalmente decidido “no queda otra alternativa” y de repente todos se abalanzaron hacia ella consiguiendo abrirla.
Ninguno de los chicos podía dar crédito a todo lo que estaba viendo: una enorme redacción llena de estantes repletos de archivadores. “¿Cómo ha llegado hasta aquí todo esto?” dijo Sarita mientras los chicos caminaban asombrados por la enorme habitación. De pronto una voz se oía al fondo. “Todo ha llegado hasta mí” repetía una y otra vez. Sentado en una enorme silla allí se encontraba embutido en un traje tan elegante en el que ni su ego encontraba un sitio. “Al final Mac me cedió todo a mí, que pensabais,¿ que haciéndome el vacío me arrebataríais el dominio del mundo?”. “Cómo no hemos imaginado que detrás de toda esta especie de conspiración contra nosotros no se encontraba alguien tan ruin como tú ,Jorge” dijo Tamara entre risas.
Dando un golpe en su larga mesa Jorge gritó :”ahora soy La Majestad no olvidéis eso, y tú (señalando a Nico ) acércame esa manzana del final de la mesa”. Envuelto en risas comenzó a comerse la manzana metiéndose a la boca un bocado enorme, tan grande como su avaricia, avaricia que se le volvió contra él quedando ahogado por un trozo de manzana demasiado grande que ni supo masticar. En su lenta agonía ninguno de los chicos hizo nada y cuando cayó muerto, Sarita no pudo evitar dar un grito.
Tras el grito se oyeron pasos y en poco tiempo en la habitación apareció la imagen de una chica que era muy conocida para todos: ¡era Ana!. “No tenéis tiempo chicos” dijo todo apurada. “Coged la llave, la llave de la chaqueta de Jorge”. Nico corrió hacia el cuerpo ya sin vida de Jorge y se hizo con la llave. “¿ Y ahora qué?” gritó Merayo. Ana muy nerviosa les confesó en voz bajita: “ tenéis que dirigiros al jardín del castillo ,allí encontraréis una lápida que tiene en el centro una cerradura, lo que contiene la caja allí escondida resolverá todas vuestras dudas”. Y de pronto Ana había desaparecido.
Los chicos se dirigieron rápidamente hacia el jardín y una vez allí frente a la lápida Stanich dijo “ ha llegado el momento de terminar con todo esto” y Nico introdujo la llave en la cerradura. La lápida se abrió y dentro había una pequeña cajita de metal. Nico la abrió y sacó una pequeña tarjeta. En ella estaba el nombre de la persona que podría llevarles al final de todo esto. Por los rostros de los chicos parecía ser que todos conocían perfectamente a la persona. Tras un pequeño silencio Nico sólo pudo decir “ ¿Por qué ella?”.

¿Se descubrirá que hacía Ana allí y por qué conocía la existencia de aquella llave?.¿Cómo pudo Mac entregarse al chantaje de Jorge?,y ¿quién será la persona que puede ayudar a los chicos a llegar a la verdad?.

Continuará el capítulo el próximo martes Maria Palencia.