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Con ese humor que me caracteriza, he bautizado a mi pequeña-coqueta sección con un nombre engañoso a fin de captar vuestro interés. Disculpad si he fundado falsas ilusiones en vuesas mercedes, pero en lo único que se podría parecer esta Casa de Citas a un 'puti' es en que alguien piense que esto es una puta m… “Vale que con todas las paranoias que se le ocurren a Stanich se podría hacer un espacio semanal, pero ¿De ahí a hacerlo?” Pues sí. Ni más ni menos que dirían Los Chichos. Cada semana soltaré una buena retahíla de breves (por vagas) reflexiones que, espero, os permitan un poco ver la vida desde otro enfoque. Mejor dicho, desenfocarla.
Además, a modo de último remiendo, incluiré cada semana alguna cita “guay” de algún chiflado reconocido en la mini-micro-nanométrica-sección el Cameo. Vosotros también deberíais colaborar con vuestras ocurrencias eh. Es un desahogo muy terapéutico, de verdad.
Espero estar a la altura de los contenidos que se vienen ofreciendo en nuestro blog, porque la esperanza es lo último que se pierde. Si queréis estar al día sobre música, deporte, cine, etc., esta no es vuestra sección. No se me da muy bien vender la moto, y casi mejor os diría que paraseis de leer porque luego no vais poder dejar de visitar la Casa de Citas. Que envicia mucho, en serio…Que destroza familias… Que como haga mi espacio de pago me voy a forrar… Y hay mucha paja.
Un consejo: Andaros con ojo y no cejéis en vuestro empeño de vivir en el marco político de la razón. Seguid leyendo, valientes.

- Hoy hablaremos del síndrome post-vacacional. No, mejor mañana.

- Cuando quieres cambiar el mundo crees en la gente. Cuando ves que no puedes, la gente empieza a creer en tí.

- Si sueñas despierto dormirás poco.

- Los idiotas tenemos el valor de la ignorancia. Por eso somos tan valientes.

- Las ciencias exactas permiten a los matemáticos hacer sus cálculos aproximados.

- Los artistas viven del cuento, sobre todo los escritores.

- Cuando alguien te llama hijo de puta no tiene porqué conocer necesariamente a tu mamá. A lo mejor sólo ha oído hablar de ella…

- Para un caníbal, un nativo puede ser un souvenir.

- La inmigración es un problema que va y viene. Unos quieren venir y otros quieren que se vayan.

- Ni todos los hombres son unos cerdos ni todas las mujeres unas zorras. Sólo les diré dos nombres: papá y mamá. Al menos uno de ellos se salvará ¿No? ¡¿No?!

- El secreto del éxito es algo que no se puede decir. Hasta el fracaso se llevaría un chasco.

- Qué fácil es hacer humor con un chino y una lavadora..

- La dolía la cabeza, así que se fue al ginecólogo.

- Las canciones infantiles son demasiado infantiles. Al igual que las canciones populares son demasiado, no sé, populares.

- Quién no sabe digerir una galleta difícilmente digerirá una derrota.

- Perdimos, pero nos llevamos la victoria moral. La ‘Liga Moral’ es un objetivo prioritario para nosotros.

- Dice mi padre que Felipe González era un chorizo. Pero, ¿Felipe González está muerto?

- Mi marido me dijo un día que se iba a por tabaco y el muy imbécil volvió.

- Las palabras se las lleva el viento. Sopla, sopla.

- Bebo para olvidar. Pero luego, de lo único que no me acuerdo es que estuve bebiendo.

- Si me das un cigarro te dejo que me des fuego.

- Si lo importante del juego fuese participar no pondrían tragaperras en los bares a mala intención.

- Lo siento, no eres el perfil que buscamos. Y además, estás gordísima.

- Ramón García se merece algo más que darnos las uvas.

- Lo hermoso de la vida son los pequeños detalles. Una vez me regalaron un clip.

- A mi abuelo le dieron el carné de conducir montando a caballo. Yo me he montado a la profesora de la autoescuela y todavía estoy esperando. La demanda.

- Yo me creía que mis abuelos habían vivido en blanco y negro. Pero en realidad no. Era color sepia.

- Qué bien huele la mierda en el campo y qué mal en el cuarto de baño.

- Ahora, la catástrofe del Titanic sería impensable. Ya casi no hay iceberg’s…

- No lo nieguen, todos tenemos un precio. Y un código de barras en la nalga izquierda. Yo en las tiendas pito.

- El aburrimiento hace ver patinaje artístico. Por eso lo llaman “Desafío bajo cero”.

- Ante la duda, desconfía. Aunque ¿Por qué me ibas a hacer caso a mí?

el Cameo
Hoy... Woody Allen