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BIENVENIDOS AL PURGATORIO

Han pasado ya seis años desde que el país ejemplar inició otro proceso en el que muestra una vez más que hace lo que le da la gana. Que ni normas ni leches.
Guantánamo se sitúa junto a la Bahía del mismo nombre, repitiéndolo para la provincia, situada en el sur de Cuba. Un enclave imperialista que a EEUU le ha sido muy útil a lo largo de la Historia.

Los Derechos Humanos perdieron consistencia a medida que el tiempo fue avanzando, la tortura se descubre en los calabozos más cercanos, pero las cárceles sin procesos legales parecen algo impensable para el “mundo libre”, para la democracia liberal que camina a trompicones tras la gran potencia mundial.

El 11 de enero de 2002 era un día más bajo la paranoia colectiva que los atentados del 11-S provocaron. Llegaron a los Campos Rayos-X los primeros detenidos por la masacre en las torres, hasta que un año más tarde fueron reinstalados en el Campo Delta. Los sospechosos iniciaron una larga carrera que convertiría la investigación antiterrorista en una caza de brujas. La Historia se volvió a empezar a escribir esta vez no bajo las tesis del comunismo, sino bajo la posible filiación a grupos terroristas de corte fundamentalista islámico, uno de los granos del culo norteamericano, o sea se, Al Qaeda.

Los detenidos comenzaron a aumentar en número e ira. EEUU se había metido de lleno en la invasión de Afganistán y los arrestados por “combatientes ilegales” llenaron inmediatamente las instalaciones estadounidenses en Cuba. Alegaron directamente que los presuntos terroristas “no eran reconocidos por la Convención de Ginebra” para así evitar un proceso legal justo. El Tribunal Supremo de EEUU junto a su Gobierno, comenzaron una politización procesal que acababa condenando sin pruebas a ciudadanos de rasgos magrebíes o árabes. Pero lo curioso fue que tan solo el 5% de los detenidos fueron cazados en territorio de guerra. Estados Unidos llegó a comerciar con los grandes Señores de la Guerra, con aquellos que se aprovechan de las situaciones políticas para sacar dinero de donde sea. Esta vez lo consiguieron vendiendo a personal capturado al azar para recibir los maletines procedentes del fondo público norteamericano. Un 86% de los residentes en Guantánamo fueron conseguidos mediante este proceso “ejemplar”.

A partir de este momento se podría decir que EEUU viola los Derechos Humanos, se podría plantar cara a un país que trafica con humanos para unos fines políticos y económicos y consolidar el Nuevo Orden Mundial. Todo eso es así y bla, bla, bla.

Sin embargo, otro Señor de la Guerra, en este caso del bando legal, instauró el abominable terrorismo estadounidense en la cárcel ilegal. La Inquisición era un Tribunal Provincial al lado de las torturas que Donald Rumsfeld legalizó en el “nuevo purgatorio”. Interrogatorios de 20 horas que se podían alargar hasta 50 días seguidos, incluyendo aquí la privación de sueño y la exposición de los detenidos a temperaturas extremadamente altas o extremadamente bajas (waterboarding). Todo eso sin contar los golpes que en cada interrogatorio los soldados norteamericanos propinan a los presos.

Los resultados: cero. Tras 800 personas aproximadamente (en el presente continúan 290) que han pasado por el infierno de Guantánamo tan solo un 18 % tenía algún vinculo con Al Qaeda. Los soldados estadounidenses, cometiendo barbaridades contra los presos de manera continua, llegaron a reconocer que se “actuó inadecuadamente con el Corán para provocar a los reclusos”. La contestación de éstos fue la convocatoria de varios centenares de huelgas de hambre y los múltiples intentos de suicidio mediante la horca. Eso es lo que sucede en el Infierno, todo ello inventado por el ejemplo mundial, por el que invade países para instaurar la democracia, por Estados Unidos.

Guantánamo es tan solo un ejemplo de las barbaridades que el ser humano puede llegar a cometer por un simple interés económico, Abu Graib otro, Irak otro, Afganistán otro, Cuba y su brutal bloqueo otro…y todo esto en el presente. Por cierto, además del petróleo, EEUU dejará tras la retirada de algunos soldados de Irak la regencia de sus bases a Mr Ronald Mc Donald. Avance el Tio Sam para hacer negocio con la muerte y la tortura.