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Una historia sorprendente

De las pocas cosas que suelo hacer casi sin alteración delante del ordenador es una visita, cuando menos, semanal, a las páginas de Reporteros Sin Fronteras y de Amnistía Internacional. Unos minutos muy bien invertidos, desde luego, ya que te enteras allí de cosas que en otros lugares no se hacen eco. Además de que son organizaciones cuya labor sólo puede ser calificada como encomiable, creo yo.

Ambas se están esforzando porque los habitantes de Occidente nos enteremos de cómo se las gasta esa China que a todos parece que nos encanta de un tiempo a esta parte, que parece que nos hemos olvidado de las torturas, recortes de libertades y otras cosas a las que se dedica una de las dictaduras comunistas más duras que quedan en el mundo. Sin duda, brillante el diseño de la camiseta de RSF que juega con los aros olímpicos convirtiéndolos en grilletes (prometo tratar de entenderme con el servidor para que la podáis ver. En caso negativo, www.rsf.org, donde está de imagen de portada).

Porque es así. En China se prohíbe informar. La censura es muy común. Los asesinatos de periodistas, por desgracia, también. No hace falta irse muy atrás en el tiempo, con lo relacionado con la revuelta en Tíbet. Claro, es que como los monjes son tan violentos y tan malos...

La gente parece haberse puesto de acuerdo en la amnesia colectiva que parece haberse apoderado de todos nosotros. Todos hemos olvidado, no ya sólo que China es hoy lo que es, sino que la plaza principal de su capital sigue presidida por el retrato de un jefe comunista que poco tuvo que envidiar a Stalin –vergüenza me da cuando voy a comprarme una camisa y me dicen que si la quiero con “cuello Mao”, de verdad-. O que en 1989 se masacró a unos estudiantes que sólo pedían libertad. Muchos de los manifestantes de Tiananmen siguen encarcelados. Pero nada. Que nos interesa China. No sabemos por qué, pero le damos alas. Un montón de millones que irán a los jerarcas y demás comandita –nomenklatura me parece que se decía en la URSS- del Partido. Único, por supuesto. ¿Los campesinos? Analfabetos, sin ver siquiera de lejos un yuan, y los disidentes en la cárcel. O fusilados, que también es común. Como digo, apoyando a China.

Pero la historia sorprendente que les quería contar tiene que ver con las dos organizaciones que llevan a cabo una encomiable labor de defensa de los Derechos Humanos. En concreto, con AI.

Todos sabemos que no se suelen cortar a la hora de denunciar torturas e injusticias. Lo que les honra, porque demuestra que las cortapisas a las que algunos les quieren someter les dan igual, que la Libertad (con mayúscula, porque esa es la verdadera) es lo primero, sin que cuente nada por encima de ella.

Pero esta vez me han sorprendido. Encargaron una campaña de comunicación para denunciar lo que pasa en China, los atropellos a los que la Libertad es sometida allí, con unas fotos que son verdaderamente duras, pero que, a juicio de quien os escribe, sólo hacen que reflejar la realidad de lo que allí hay. Pero les ha parecido demasiado dura, incluso para ellos. Sólo se refieren a ello en su página web para aclarar que no tienen que ver en que las imágenes se hayan difundido por Internet. Y sólo en página a nivel mundial, no en la versión en español.

Señores de AI: las imágenes, como ya he afirmado, son duras. Pero créanlo, es seguro que la situación para los que tienen la desgracia –allí lo es- de siquiera pensar en la Libertad es aún peor. ¿Por qué se niegan a mostrar al mundo lo que pasa en China acompañándolo del sello de su organización? No puede ser bueno. Y no iba a ser malo que las hubiesen difundido con su logotipo en las imágenes.

Aunque lo de AI es perfectamente perdonable –cada uno sabe lo que desea hacer con sus encargos, si usarlos o no- no lo es la connivencia que todo Occidente está mostrando para con China. Se montó algo de escándalo cuando Ángela Merkel dijo que no iba a ir a la inauguración de los JJOO, pero no pasó de ahí. Nadie tenía que ir.

Pero nada. Nosotros a lo nuestro. Y la Libertad, en el limbo, durmiendo el sueño de los justos. Al menos, en China.

Saludos a todos.

Enlaces relacionados:

Web de RSF: www.rsf.org

Webs de AI: www.amnesty.org (en inglés), www.es.amnesty.org (sección española)

Web donde se pueden ver las fotos de la campaña:

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/07/09/comunicacion/1215605900.html