feedburner

Recibe las actualizaciones de DIARIO DE PERIODISMO

Apuntes de Geografía

Etiquetas:

NO SE GANÓ EN UNA HORA



Hola,

Ya es más martes que lunes, pero estaría muy feo por mi parte el no predicar con el ejemplo esta semana, así que aquí vengo con la retahíla geográfica. Como de costumbre, voy a enlazar el contenido de hoy con algo que se comentara en un artículo anterior. Podría ser el de la semana pasada, pero he preferido irme al último que se pudo considerar ordinario, que se remonta nada menos que al 7 de abril. Esa semana hablaba de pinos y de municipios españoles que llevaran en su nombre alguna alusión a ese árbol. Me refería, entre otros lugares, a la localidad que hasta hace unos años se llamó simplemente Pino y que ahora se denomina Pino del Oro. He decidido tomarlo como inicio de esta semana para dedicar un monográfico a la provincia en la que se encuentra, Zamora. Entre otras razones, porque se trata de una zona que bastantes lectores habituales del blog (si es que aún los quedan) conocerán bien y quizá sientan curiosidad por saber algunas cosas curiosas, como las que pasaré a contar.

La provincia de Zamora es la penúltima por orden alfabético de España, pero la única donde la capital es el último municipio siguiendo ese mismo criterio de clasificación. Vamos, que aquí sí se cumple aquello de los últimos serán los primeros. La superficie se puede calificar de mediana, con 10.561 kilómetros cuadrados. Pero si nos vamos a la población, nos encontramos con que sólo habitan este territorio 197.237 personas. La densidad, por tanto, no llega a 19 habitantes por kilómetro cuadrado. Claro que lo peor no es la poca cantidad, sino que cae en picado: en 1991, la cifra de habitantes era de 213.668. Hágase la pertinente resta y sáquese el porcentaje de población perdido, y existirá la posibilidad de sobrecogerse. Aunque hay que remontarse hasta 1950 para encontrar el máximo histórico, fijado en 316.493 habitantes. La cantidad perdida desde entonces no merece otro calificativo que apabullante.

Una de las grandes causas de que la población siga descendiendo año tras año es el envejecimiento: de los 197.237 habitantes, 55.912 tienen más de 65 años, lo que supone más de un 28%. La mayoría de sus 248 municipios son poco menos que geriátricos. Si digo que en cinco municipios no hay ningún menor de 16 años quizá suene a poco, pero si añado que en otros 55 los vecinos menores de esa edad no llegan a 10, entonces sí se podrá tener una idea de la magnitud del problema. Uno de esos cinco pueblos sin ningún habitante joven es Quintanilla del Olmo, el municipio menos poblado de la provincia, con 42 vecinos. En 1991 eran 74, para añadir más sobre lo del despoblamiento. No son muchos los ayuntamientos que no sobrepasan los 100 habitantes, 16, pero esta cifra cuadruplica a la de 1991. Igualmente, los municipios con más de 1.000 moradores son sólo 23, mientras que en el citado censo de inicios de la década pasada eran 32. El dato, como digo, empeora a cada renovación del padrón, excepto en lugares muy concretos.

Con estos datos, que nadie espere encontrar grandes urbes. La ciudad de Zamora tiene 66.138 habitantes, que la convierten en una de las capitales más pequeñas del país, con el agravante de un padrón más bien estancado. Le sigue en importancia Benavente, con 18.744 vecinos, y de la que puede decirse que es la única localidad de la provincia con un crecimiento continuo, junto con otro caso que citaré enseguida. Detrás está Toro, de importancia histórica innegable pero de presente no tan boyante, con 9.738 vecinos y una población igualmente estancada. Pero a continuación descendemos ya hasta los discretos 2.345 habitantes de Morales del Vino, un pueblo que ha duplicado su población desde 1991, gracias a su proximidad a la capital. El resto de centros comarcales de la provincia son pueblos rematadamente pequeños, en los que imagino que las actividades agrarias tendrán poca alternativa. A los de la zona les sonarán importantes nombres como Alcañices, Bermillo de Sayago, Carbajales de Alba, Fermoselle, Fuentesaúco, Puebla de Sanabria o Villalpando, pero esas localidades sólo tienen, según el último padrón oficial, 1.052, 1.267, 671, 1.482, 1.935, 1.614 y 1.651 habitantes. Unos datos tan paupérrimos hacen grande al pueblo de Villaralbo, próximo a la capital como Morales del Vino, con sus exiguos 1.793 vecinos.

Podría seguir aburriendo con datos, pero como para dar cifras exactas ya está el Instituto Nacional de Estadística, mejor pasar a observar la toponimia. Y nada mejor que empezar poniendo pies en Polvorosa, con mayúscula, lo cual no quiere decir que me vaya a largar sino a recorrer la comarca de ese nombre, próxima a Benavente. Ignoro si la expresión guarda o no relación directa con la zona; imagino que sí, pero como no lo sé, animo a que si alguien lo sabe nos ilustre con un comentario y nos explique el origen de esta frase. A lo que yo voy es a que el nombre de la comarca ha quedado en la denominación de varios municipios, como Arcos de la Polvorosa, Fresno de la Polvorosa, Manganeses de la Polvorosa y Santa Cristina de la Polvorosa. Manganeses era conocido por el acto del Salto de la Cabra que se realizaba durante sus Fiestas, y que fue suprimido tras las denuncias de grupos en defensa de los animales y para evitar sanciones administrativas. Rastreando en internet he podido saber que, al menos en 2007, el animal se sustituyó por un muñeco de trapo. Igualmente. si algún conocedor de las Fiestas de esta localidad pasa por aquí y quiere explicar qué es lo que se celebra actualmente en lugar del controvertido acto, a su disposición están los comentarios.

El "de la Polvorosa" no es el único Manganeses que hay en Zamora, ya que también está Manganeses de la Lampreana. No sé qué quiere decir lo de "Manganeses" (a mí me suena a manganeso, pero no creo que la cosa tenga que ver con la química), ni si la "Lampreana" va por las lampreas, pero sí puedo decir que el predicativo se repite en otros municipios como Pajares de la Lampreana y Villalba de la Lampreana. Volviendo a este otro Manganeses, tiene una pedanía que se denomina Riego del Camino, de donde no proviene el famoso himno republicano, pero a lo mejor a alguien se le ha ocurrido hacer broma con esta coincidencia toponímico-genealógica.

Siguiendo con comarcas, si hay dos zonas de Zamora que se conocen más en el exterior, aunque sea de oídas, son la Tierra del Pan y la Tierra del Vino. Su delimitación es difusa, aunque más o menos la Tierra del Pan queda al norte de la capital y la del Vino al sur. Los dos predicativos están también en el nombre de varios municipios, como Palacios del Pan (que suena a hogaza recién hecha en el horno) o El Cubo de Tierra del Vino, que para pronunciarlo seguido más vale coger algo de aire antes (por lo largo). Claro que tampoco se debe olvidar otra comarca destacada como la de Sayago, a la que remiten, entre otras muchas, las localidades de Fresno de Sayago, Moral de Sayago o Muga de Sayago, además del ya citado Bermillo. Y cómo no, citar la Tierra de Campos, a la que pertenece la zona más nororiental de la provincia y que deja su huella en topónimos como Cerecinos de Campos o Castroverde de Campos.

En la zona más noroccidental está Sanabria, en torno al conocido lago. Otra comarca que no sólo deja constar su nombre en Puebla de Sanabria, sino también en el municipio de Palacios de Sanabria y su agregado de Otero de Sanabria, por poner dos ejemplos. En esta comarca, dato curioso que quizá muchos no sabrán, hay una aldea llamada Vigo, mucho más pequeña que la homónima ciudad gallega, tanto que desde mediados del siglo XIX pertenece al municipio de Galende.

Los ríos también identifican un buen número de topónimos. No hace falta ser muy listo para saber cuál pasa por Camarzana de Tera, Santibáñez de Tera, Vega de Tera, Micereces de Tera o Santa Croya de Tera, aunque si alguien conoce a una mujer que se llame Croya que haga el favor de hacerlo saber. De la misma forma, no hace falta decir qué aguas discurren cerca de Almaraz de Duero. Las del mismo río que por Peleagonzalo, pueblo de nombre más que curioso (creo que en realidad es una deformación de Pelayo Gonzalo) que en 1860 fue destruido por una riada y reconstruido en otro lugar situado en una cota más alta. Lo mismo que Villalazán, otro municipio ribereño del Duero.

No sabemos si en Peleagonzalo habrá algún Gonzalo con ganas de pelea, ni tampoco si tendrán ganas de gresca en Peleas de Abajo y Peleas de Arriba, dos localidades situadas a pocos kilómetros al sur de la capital zamorana. La primera es municipio independiente, mientras que la segunda pertenece al vecino Corrales desde la década de 1960. Y muy cerca de allí hay otro pueblo que, para mi gusto, tiene el nombre más peculiar de toda la provincia, Cazurra. Su población es de sólo 79 habitantes, pero ello no le impide tener una completa página web (http://www.cazurra.com/), donde se explican dos posibles hipótesis para el origen del topónimo: una voz prerromana que querría decir "montículo natural pedregoso e inculto que esta en medio de una propiedad cultivada", o bien un término de origen vascuence que significaría "el comedero o pesebre portatil para el ganado lanar". En definitiva, nada que ver con el significado actual del descalificativo adjetivo que viene a la mente al ver este nombre. Felicidades por la página web, por cierto.

Otros topónimos curiosos pueden ser Peque, Guarrate, El Perdigón, Fuente Encalada, El Maderal, Villavendimio, Matilla la Seca, El Pego o Casaseca de Campeán, entre otros muchos dignos de interés. Aunque como esto se está haciendo ya muuuuy largo, voy a terminar hablando de topónimos-gentilicios, es decir, que apuntan a una fundación por parte de personas originarias de otro lugar. Ése es el origen más verosímil para los pueblos de Gallegos del Pan y Gallegos del Río, así como para Asturianos y las aldeas de Bercianos de Aliste (en el municipio de San Vicente de la Cabeza), Bercianos de Valverde (en el ayuntamiento de Pueblica de Valverde) y Bercianos de Vidriales (agregado en la década de 1960 a Santibáñez de Vidriales). Vete a saber si algún antepasado de Diego Merayo (el único berciano que me viene ahora a la mente, discúlpeme usted) anduvo poniendo su semillita por estas tierras, pero el caso es que las referencias ahí quedan aún en la actualidad.

Bueno, pues acabaré ya por aquí. Dice el refrán que Zamora no se ganó en una hora, como una hora espero que no os haya llevado el leer esto. A mí, escribirlo sí, y bastante más. Pero quería ser exhaustivo. ¿Ha valido la pena? Espero que sí.

Saludos y hasta la próxima.

Reflexiones a Pilot Rojo

Etiquetas:

QUITAR Y PONER TELEVISIONES

Durante muchos meses los medios de comunicación privados, atendiendo a una única línea editorial de criminalización del “eje del mal”, apuntaron a Venezuela una y otra vez para machacar y triturar el tema de la no renovación a la cadena Radio Caracas Televisión. Los motivos que presentó el Gobierno presidido por Hugo Chávez fueron las probadas colaboraciones de la cadena de radio y televisión con los golpistas del 11 de abril de 2002, que dejaron varios días fuera del poder al ejecutivo elegido democráticamente. RCTV grabó un comunicado de los generales golpistas indicando que las calles estaban inundadas por la violencia y que la policía de Venezuela junto con grupos de izquierda habían asesinado a varios manifestantes opositores al Gobierno. Un cámara de la televisión venezolana tuvo el valor de destapar aquella conspiración: ese comunicado se había grabado antes de la hora de convocatoria de las manifestaciones, antes de que se produjera ningún muerto. Todo esto llevó a la investigación del caso con el curioso resultado de que fueron los propios golpistas los que realizaron los asesinatos para inculpar al Gobierno de Chávez.

La licencia de esa cadena finalizaba en abril del año pasado; antes era difícil por no decir imposible ser cerrada. El Gobierno esperó al fin del contrato y retiró aquella licencia de la Televisión privada para crear una nueva televisión pública: es decir, propiedad del Estado (como RTVE) y sin ánimo de lucro ni intereses empresariales.

La retirada de la licencia puede ser más o menos discutible, eso es evidente. Lo que no es profesional es machacar a un Gobierno que realizó una labor atendiendo a las leyes en funcionamiento desde hacía tiempo. Las mentiras caían como la insoportable lluvia de éstos días, apuntaban a un cierre cuando en realidad se había producido una no-renovación.

Hoy en Italia ocurre algo realmente grave. La información sobre este suceso es bastante objetiva en todos los medios de comunicación pero no abre periódicos ni ocupa grandes espacios informativos. Silvio Berlusconi, en su política de creación de un Estado para –fascista con un modelo económico inspirado en la camorra (neoliberalismo llevado al extremo), juega con las televisiones del país como si de un monopoli se tratase. Una de ellas, perteneciente al grupo Mediaset que a su vez es propiedad de Silvio Berlusconi, emite ilegalmente en Italia desde 1999, año en el que perdió su licencia tras un concurso público. En este caso ganó la frecuencia anteriormente de Rete 4 la televisión del empresario Francesco Di Stefano, Europa 7. Sin embargo, el enorme poder que el ahora Presidente del Gobierno italiano ha acumulado siempre en ese país, ha permitido que la cadena Rete 4 haya continuado su emisión en la frecuencia de Europa 7 pese a las innumerables sentencias favorables a esta última.
El Tribunal Europeo de Justicia emitió la última, obligando a la retiración de la cadena de esa frecuencia ocupada a partir del 31 de enero de 2008; en el caso de incumplir la sentencia el Gobierno de Italia deberá abonar como multa 350 mil euros al día con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2006. Es decir, el extremo abuso de poder de Silvio Berlusconi dará el resultado de siempre: acabará pagando el pueblo los caprichos de su corrupto presidente.

En España y más o menos en la actualidad, una cadena de televisión, La Sexta, fue otorgada por el Gobierno de Zapatero a dedo sin atender mucho a la ley vigente. También el Gobierno de González arregló de manera sencilla la adjudicación de emisoras en su etapa más dura.

Estos últimos casos no llaman la atención. Son simples lances del juego de la comunicación capitalista, pequeñas lagunas que se subsanan con dos o tres noticias para que al final todos sigamos tan democráticos como siempre.

Sin embargo cuando hablamos de un hecho más o menos afortunado del Gobierno venezolano pero total y absolutamente legal, nos referimos a un tirano, a un dictador y otros descalificativos que no vale la pena recordar.

Donde hay dinero e interés, existe problema hasta cierto punto: Berlusconi está de lado del capital y Chávez del lado socialista. He ahí el meollo de la cuestión.

Apuntes de Geografía

Etiquetas:

¿A LA MIERLA?


Hola,

Tan sonoro título puede quizá espantar a primera vista, pero con él pretendo hacer un doble sentido. No me salgo de mi tema porque La Mierla es el nombre de un municipio de la provincia de Guadalajara, cuyos escasos 25 vecinos estarán hasta las narices de que la gente de los pueblos cercanos tienda a cambiar una de las letras de su nombre por otra con objeto de hacer mofa. Pero a esa letra cambiada, que no voy a mencionar aquí aunque resulta obvia, es la deriva hacia la que me temo que está tomando este blog, a juzgar por las pocas entradas que se ven en las últimas semanas y los todavía menos comentarios que a ellas se aportan. Y es una verdadera lástima, porque desde el primer día este rincón de internet me resultó muy interesante y admiré su actividad. Me apena que, por la razón que sea, parezca destinado a caer en el olvido.

Resido a 600 kilómetros de distancia del lugar donde nació y se desarrolló este blog, por lo que desconozco los motivos que están llevando a su paulatino abandono y ni siquiera creo que esté facultado para elucubrar al respecto. Lo que sí puedo (y creo que debo) hacer es elogiar a Diego Merayo por poner en práctica su idea y conseguir mantenerla durante tanto tiempo, esperemos que todavía mucho. También debo tener palabras de calado similar para Karny y Patino, por ser los únicos que han ido manteniendo una regularidad en la publicación de mensajes y que, ante estas eventualidades, aún siguen en la brecha ofreciendo sus distintos puntos de vista sobre la actualidad. Me resulta admirable que lo hagan, así que creo que merecen esta mención.

Por mi parte, sólo puedo decir que cuando ves que algo no tiene actividad y tú no tienes contacto con quienes le dan (o le deben dar) impulso, te entra un cierto desánimo que hace que se te contagie la apatía. Que no se me tome por moralista, insisto en que no soy quién para valorar por qué este blog se muestra casi estático en las últimas semanas. Tan sólo quiero animar a evitar que este sitio de internet decaiga del todo, porque creo que sería una pena. Comprendo que el día a día genera estrés y quita tiempo y ganas, pero eso no ha de impedir que, antes o después, se aporte el grano de arena para que la idea no muera. Creo que el esfuerzo de su creador y la constancia de las otras dos personas que semana tras semana aún le van insuflando aliento con sus artículos de opinión no se merecen un final tan temprano por inanición.

Dicho esto, invitando a la reflexión, paso a escribir de geografía. Hace un par de semanas estuve en Guadalajara en un congreso de Prensa y Periodismo Especializado, que creo que hubiera sido una convocatoria más que interesante para vosotros, dados los temas que allí se abordaron. Si alguien quiere saber algo más al respecto, hoy he empezado a colgar en mi blog (al que se puede acceder pulsando mi nombre en la barra que aparece a la derecha) unas impresiones sobre esta convocatoria. Pero como de lo que se trata aquí es de dar pinceladas sobre geografía, lo suyo es explicar que aproveché el viaje para conocer lugares recónditos de las provincias de Guadalajara y Soria, en lo que para mí constituyen unas vacaciones ideales. No, no estuve en La Mierla, pero sí en localidades de tamaño similar, algunas con el atractivo añadido de un curioso topónimo.

No sé si quienes pasan habitualmente por esta web conocerán la existencia de Atienza, en el extremo norte de Guadalajara. Es probable que sí, porque se trata de una bella localidad monumental cuyo casco urbano fue declarado Monumento Nacional en 1962. Eso sí, conoció tiempos mejores, porque a día de hoy sólo la habitan 454 personas. Me podría extender hablando de sus iglesias románicas, de su castillo o de sus plazas porticadas, pero prefiero cambiar de escenario, de provincia, de comunidad autónoma incluso, para trasladarme a Rello, un pequeño rincón de Soria en donde las elecciones duran lo que tarden en votar sus 31 habitantes. Otro conjunto urbano que impresiona, pero en parte también por las huellas que sobre él ha dejado la despoblación, con sus murallas semiderruidas y muchas de sus casas convertidas en poco menos que solares. Aún tuve la suerte de encontrarme a dos de sus vecinos; uno de ellos, una mujer, decía que se alegraba de que fuera gente a ver el pueblo, porque así al menos encontraba alguien con quien hablar.

Al oír el nombre de Andaluz, probablemente pocos sabrán que se trata también de otro minúsculo pueblo soriano, que incluso dejó de tener jurisdicción propia hace ya 40 años. La denominación probablemente venga de la época musulmana, como un lugar fundado por andalusíes. Sea como fuere, el caso es que hoy día sólo tiene censadas a 23 personas. La fortuna quiso que me encontrara con una de ellas, de nombre Jesús, que guarda en su garaje una magnífica colección de aperos agrícolas de todo tipo y que gustosamente se ofreció a enseñarme. Nunca imaginé tanta amabilidad con el forastero en un pueblo tan pequeño, una solitaria y lluviosa tarde de mayo. Si vais alguna vez a Andaluz, por cierto, no dejéis de ver su impresionante iglesia románica con un bonito pórtico de entrada. Os aseguro que vale la pena.

Como igualmente sorprende el castillo de Gormaz, desde el que se divisa buena parte de la zona. En primer término, no obstante, lo que se observa es el pueblo homónimo, que nunca fue muy grande y que hoy sólo tiene 20 habitantes. Otra localidad que se observa desde allí arriba es Recuerda, un nombre difícil de olvidar y que quizá alguien interpretaría como lo contrario de reloca. Este último municipio tiene la redonda cifra de 100 vecinos, desperdigados además en varios pueblos. La población ha disminuido nada menos que un 43% desde 1991. Y es que no solamente se trata de zonas poco habitadas, sino que además casi todos sus moradores son de edad avanzada y la parca va yendo a buscarlos de vez en cuando.

Otro lugar de pasada fue Retortillo de Soria (234 habitantes en todo el municipio, apenas 120 en el propio pueblo), que tuvo que ponerse el predicativo en 1916, por aquel Real Decreto del que ya hablé en otras ocasiones, y que obligó al cambio de nombre de centenares de municipios para evitar coincidencias en la denominación con otros. En este caso, Retortillo tuvo que ser "de Soria" para evitar confundirlo con otro Retortillo salmantino. El amigo que me acompañaba en este viaje y yo nos preguntamos cuál será el gentilicio de este pueblo, si tal vez ¿retortilleros?, aunque lo cierto es que en ese caso no sonaría demasiado bien, sobre todo para las mujeres, dado que podría inducir a bromas de mal gusto.

Volviendo a la provincia de Guadalajara, no puedo evitar referirme a Villacadima, una localidad despoblada (que no completamente abandonada) donde hay, cómo no, una iglesia románica más que interesante. Pero lo que llamaba mi atención en ese momento era el silencio absoluto que se respiraba en aquel lugar, a más de 1.300 metros de altitud y a varios kilómetros de cualquier núcleo habitado de forma permanente. Junto a las decenas de casas totalmente en ruinas había otras arregladas, prueba de su ocupación ocasional, pero en ese instante, a pesar de ser domingo a mediodía, allí no había nadie más que mi amigo y yo. Una soledad desoladora que se repite, con más fuerza si cabe, en cientos de lugares de zonas rurales de toda España, aunque especialmente en el castigado territorio del centro peninsular. Como casi todos los habituales del blog habéis crecido por esa parte, sabréis a qué me refiero.

Para terminar, citaré la villa de Cogolludo, uno de los núcleos más poblados que visité (569 habitantes en el casco urbano, 645 en el municipio), y que, tal y como indica la rima fácil que se extrae de su nombre, tiene un casco histórico con dos cojones, digno de ver, vaya. Lo mismo que la soriana Berlanga de Duero, el pueblo más grande que vi en este periplo (862 vecinos en la villa, 1.056 en todo el municipio). Lugares interesantes, como Albendiego (Guadalajara, 40 habitantes) o Campisábalos (junto a Albendiego, 56 vecinos), que rara vez existen para el imaginario colectivo pero por los que puede ser toda una experiencia callejear y, sobre todo, conversar con las pocas personas que te encuentres en tu camino.

Así que os animo a conocer este tipo de pequeños rincones de mundo y aumentar así no sólo vuestros conocimientos en geografía, sino también dejar buenos momentos para la memoria. Y, al mismo tiempo, os animo a no dejar que este blog muera en el olvido como lo han hecho tantos y tantos pequeños pueblos como los que he visto. Insisto en que ni su creador ni quienes le han ido dando vidilla lo merecen. Desde la distancia, sólo decir que la apatía se contagia, pero la actividad también. Confiemos en que comience a predominar lo segundo.

Saludos y hasta la próxima, que de una u otra forma la habrá.

El vuelo de la gaviota

Etiquetas:

Trabajando por la Universidad

Al menos, eso es lo que decía Alternativa Universitaria en los días inmediatamente posteriores a las elecciones del pasado 15 de abril que iba a ser su actitud día a día. Saliendo al paso de propuestas electorales propuestas por otros grupos, diciendo que se han movido contra Bolonia –montar una cacerolada no es moverse, aunque de la ciudad italiana hablaremos más adelante- o que han conseguido el referéndum sobre el calendario académico, algo totalmente falso, ya que no han hecho NADA en absoluto.

Bueno, realmente esta última aseveración de un servidor es un poco falsa. AU sí que ha hecho algo tras las elecciones, amén de las molestas pancartas que acostumbran a colgar en el hueco central de la facultad de Filosofía y Letras, con reivindicaciones tan necesarias para los estudiantes –nótese el tono irónico- como la cacerolada a la que antes me refería. Y lo que ha hecho, al menos últimamente, AU ha sido el ridículo.

Sí, porque en su tónica habitual de decir que se preocupan por transmitirnos a los estudiantes de qué va Bolonia, cómo nos va a afectar, y demás, han llegado a caer en un estrepitoso ridículo el miércoles de esta semana que se acabará en breve. Con una especie de pantomima teatral –es que no puedo decir que fuese teatro, sería ofender al Arte- en la que escenificaban un entierro –de las ofensas al Catolicismo por parte de estos individuos ya hablaremos en otro momento- de la Universidad, afectada por Bolonia. Con sus plañideras y todo, oiga.

Para decir que trabajan por la Universidad. No, no es cierto. Trabajan en hacer cosas como la que les relato. Trabajan en cómo no trabajar. Trabajan en mantener una Sala de Alumnos en Filosofía y Letras que debería estar abierta a todos los alumnos durante un cierto número de horas todas las semanas como su reducto particular. Su sede, vamos. Será que no tienen suficiente con el local de Alfonso VIII...

Sinceramente, no me sorprende. Me sorprendió sobremanera que la gente no aprendiese de otros tiempos en los que AU ya tuvo el claustro universitario en su poder. Una época, que, por no extenderme, dejaré en el calificativo de “gris”. Por no decir que negra, ya que no se hizo nada en la Universidad. Ni por los universitarios. De aquellos lodos...

Pero tranquilos. Que ellos ahí siguen. Trabajando por la Universidad.

Reflexiones a Pilot Rojo

Etiquetas:

HOMÓFOBOS

Justo ayer, 17 de mayo, pero 18 años antes, la Organización Mundial de la Salud decidió que ya bastaba de tanto moralismo reaccionario y eliminó de la lista de enfermedades la homosexualidad. Por fin, la ciencia y la razón humana vencían a la estrepitosa voz reaccionaria que durante toda la Historia impuso su criterio de con quién teníamos o no que follar y por qué. Los trasnochados respondieron y siguen respondiendo en contra de la igualdad, en contra de la normalidad, intentado pintarnos una realidad hecha a su imagen y semejanza. Nos venían los viejos argumentos de que la reproducción solo se lleva a cabo entre un hombre y una mujer, que es antinatural y antimoralista y que Dios no hizo a un homosexual pensando en su figura, sino que son caminos que la mente lleva hacia el abismo de la equivocación. Para más señas, de la enfermedad.

Señores reaccionarios y reaccionarias: la naturaleza se ocupa de otras cosas. A la naturaleza la damos igual, ella va a su rollo. No juzga a dos hombres porque mantengan una relación ni a dos mujeres porque hagan el acto sexual bajo la luz de la luna. La naturaleza se encarga de llover, de nevar, de hacer terribles terremotos y también de ofrecernos espléndidos días de sol y playa o de fresca montaña. Como han podido comprobar, señores reaccionarios y reaccionarias, la madre naturaleza (por cierto, ¿quién es el padre?) no está con una cámara oculta en las camas de todos y cada uno de nosotros para ver en que tipo de agujero descargamos nuestro esperma.

Les propongo un juego, señores reaccionarios y reaccionarias: dos personas se conocen, toman un café, se mandan mensajes cutres por la noche, un día se dan un beso, otro echan un polvo y entablan una bonita relación. Cuando pasan unos años, deciden casarse y tener hijos. Él trabaja de fontanero en una pequeña empresa que regenta su cuñado y él es peón de la construcción. Ahora quiero que me digan por qué esto no. Por qué son enfermos y cual es la célula hipocóndrica almorranítica que les impide ser normales. Yo tengo la respuesta: son ustedes. Los reaccionarios y reaccionarias, homófobos y homófobas, son la causa de su “enfermedad”. Ustedes son esa célula cancerígena que les transmite miedo al rechazo, que les rasca en lo más profundo para que se anden siempre con miramientos. Señores homófobos y homófobas, necesito que me expliquen quién es ese Dios que ama a todos como hijos pero a los homosexuales y lesbianas no. Quién es ese Dios que deshereda a la gente normal y enriquece a anormales como ustedes. Quién. ¡Ah! Que no existe. Que son ustedes los quebrantahuesos que dividen y enseñan el odio.

La Organización Mundial de la Salud debería replantearse ciertas cosas. Por ejemplo el estudio de este tipo de personas, que sin duda se les puede catalogar como enfermos. A ellos sí. En el caso contrario, de malvados.
Cuando se les llena la boca con la igualdad, que actúen. Cuando cantan en misa el “todos como hermanos”, que lo demuestren. Cuando por fin se den cuenta de las barbaridades que sueltan por la boca, que pidan perdón.
Mientras tanto, que Dios les tenga en su santa gloria. Traducción: que les den.

Reflexiones a Pilot Rojo

Etiquetas:

Mañana, 10 de mayo de 2008, la Cadena SER de Valladolid emitirá una de estas dos columnas sobre el Primero de Mayo. Aunque hayan pasado ya unos días, desde la cita la gran amiga de diariodeperiodismo y locutora de Radio Valladolid Eva Moreno y con el apoyo de Diego Merayo, decidió dar un espacio al blog en la emisora. No se pierdan mañana de 12 a 14 horas A Vivir Valladolid en la Cadena SER. Gracias en nombre de todo el equipo de diariodeperiodismo.


PRIMERO DE MAYO (I)

Parecía difícil conseguir un poquito de caso tras tanto sufrimiento, pero al final se logró. La plaza de Haymarket se “pervirtió” con “chusma obrera” para reivindicar “un sueldo a cambio de no trabajar nada”, o al menos así lo contaban los periódicos de la época. El Chicago de 1886 era un agujero de explotación venerada que superaba con creces al resto de Estados Unidos. Los sueldos apenas llegaban para comer y las jornadas laborales ascendían en muchas ocasiones a las 18 horas de trabajo. Todos los días eran lunes: ni siquiera existía el sábado de ilusión en el que se trabajaba pensando en el día de descanso. Pero no, no existían los domingos.

Pregonaban el anarquismo; la A dentro de un círculo se erigió en su bandera, pero creo que más que eso, lo que hacían era cantarle a la dignidad y a la justicia, contra el yugo patronal que asfixiaba sus vidas. Y es que vivían para trabajar alejados de aquello más preciado, el tiempo libre.

Un personaje despuntó por su valor y entrega. El periodista Zeitung Fischer utilizó su periódico para imprimir 25 mil octavillas que animaban a continuar la lucha de clases. Con un ¡Tened coraje esclavos! ¡Levantaos! Dirigió a la retaguardia hacia la huelga y a él hacia la horca.

La represión de Haymarket fue tan desinformada como lo ha sido durante toda su historia la clase trabajadora.
El Congreso Obrero Socialista de 1889 encendió una vela en la ciudad de la luz en recuerdo de los Mártires de Chicago que ese Primero de Mayo se habían levantado y que después la policía había asesinado. Desde entonces las plazas y las calles se tiñen de rojo obrero para escuchar los gritos de lucha pidiendo derechos que hoy en día no están bien cosidos en el estatuto del trabajador.

Hay quien sale a la calle con un programa mínimo reclamando los más básicos derechos laborales: un sueldo digno sin ser a costa de horas extras, unas relaciones igualitarias en el contrato y en el despido…y otros muchos soñadores salen con ese programa máximo pidiendo y proclamando el cambio radical: la República de los trabajadores.

Pero el Movimiento Obrero no se ciñe a una calle, a una pancarta y a un megáfono. El Movimiento Obrero es mucho más que eso. Tampoco es una forma de vida: es la vida. Desde que Pancho Villa y Zapata pidieran Tierra y Libertad en el México de inicios de Siglo XX hasta que el Subcomandante Marcos bajara el 1 de enero de 1994 de las montañas junto a sus compañeros zapatistas en busca de lo mismo, en esa Chiapas del mal de ojo y de la explotación.

Hoy en día el poder económico convirtió al obrero en empleado, al patrón en empresario y a la relación capital-trabajo en consumo-consumidor. Ya no se hacen revoluciones, se estudian; aunque siempre queda en corazones inconformistas la bandera de la reivindicación: esa que sacan el Primero de Mayo para recordar que aún queda mucho por hacer y también lo mucho que se ha deshecho.

PRIMERO DE MAYO (II)

Durante toda la Historia hemos visto cómo lo humano se comía el polvo frente al tirano. Nos hemos cargado a miles de millones de personas en los libros de Historia de plumazo en plumazo, como si de un pisotón acabamos con una familia de hormigas. Nos aprendíamos sin fijarnos cómo el más poderoso asesinaba sin lamentarse a los más débiles del planeta. Nos entró por un oído y nos salió por el otro.

Hoy en día el ser humano es más listo. Hemos sido capaces de maquillar, mentir, manipular y esconder las sucesivas repeticiones de esa Historia que estudiamos antaño. Mantenemos la compostura ante los muertos en las guerras, giramos la cabeza con los miles de niños que se evaporan literalmente por la hambruna y renunciamos ya definitivamente a aquellos trabajadores explotados en todas las partes del mundo: los indígenas sudamericanos en los trabajos forzados, los pueblos autóctonos expropiados gratuitamente o eliminados por su rebeldía, las organizaciones multinacionales dueñas de la extorsión explotadora y millones de casos más.

El movimiento del Primero de Mayo lucha con mil objetivos. Ya no solo contra las injusticias que en nuestros países ricos existen, sino contra la criminalidad laboral que asola el planeta de Este a Oeste. Los gobiernos marioneta que hacen oídos sordos a las infrahumanas condiciones de trabajo de sus ciudadanos en favor de las multinacionales son los ejemplos a seguir para el gran poder económico occidental. Todo sea por pillar un buen trozo del pastel, sea cual sea la parte. Sin embargo los movimientos insurgentes que luchan contra todo esto, los partidos políticos que realmente llevan en su programa la Declaración de los Derechos Humanos, son los violadores, terroristas, asesinos y demás lista adjetival no precisamente buena. El rebelarse en busca ya no solo de la dignidad laboral, sino de la propia dignidad humana es considerado parte del terrorismo de hoy día. Las buenas intenciones están en los Parlamentos y no en el extrarradio de La Paz o en los campos del sur de México. Las mejores decisiones a favor del obrero las firman organizaciones dormidas en su conformismo y no la gente que ya no puede más. Esos son los violentos.

Cada Primero de Mayo, como es natural, salen a la calle. Los de allí piden siempre por la mejora de su situación; los de aquí piden por la suya pero también parte de esa marcha cruza el estrecho o el Océano Atlántico. Salen como pobres diablos. Al final así quedarán a los ojos de las masas que habitan la rica Europa. Quizás queden más como diablos pobres: gente mala que quiere expropiarnos a los ricos porque no tienen donde caerse muertos. Vagos les llamaremos. Dictadores, tiranos, violentos...incluso les insultaremos con el término revolucionarios. Esa palabra terrorífica que tanto ha de darnos miedo. Ese vocablo que tiene el aberrante significado de querer un mundo más justo para todos, en especial para aquellos que trabajan 16 horas a cambio de chabolas y comida dos días a la semana.

Pese a quien pese, el Primero de Mayo siempre estará ahí. Si en 1886 los obreros de Chicago luchaban contra esa explotación sobre hambrientos que trabajaban 18 horas diarias, en 2008 en la mayor parte del mundo se sigue luchando por lo mismo. Es la tristeza en la que desemboca la Historia y en la contradicción que cae cuando se habla de un mundo desarrollado. La pregunta es, ¿Desarrollado para quién? Por todo esto, que nunca muera el Primero de Mayo.

Tr3s Son Multitud. La serie por capítulos